dilluns, 16 de juny del 2008

LA ROZÓ DOS VECES CONSECUTIVAS



Champions league 1999-2000

Sin duda, una de las campañas más inolvidables del Valencia a nivel europeo. Los de Mestalla realizaron partidos excepcionales y fueron la admiración de todo el continente, al alcanzar la final de la competición en su primera participación. No pudo ser, el Valencia perdió la final contra el Real Madrid, y quedó subcampeón de Europa, todo un orgullo, aunque agridulce, para la afición valencianista. La competición comenzó muy pronto para el Valencia, puesto que al haber quedado cuarto en la Liga española, tenía que superar una eliminatoria previa contra el Hapoel Haifa israelita para acceder a la Liga de campeones. El partido de ida se disputó el 11 de Agosto de 1999 en el estadio Kiriat Eliezer (Haifa, Israel), y el Valencia consiguió una cómoda victoria por 0-2, con goles de Claudio López y Farinós. La vuelta, prácticamente sentenciada, se jugó el 25 de Agosto en Mestalla ante más de 35.000 espectadores, y el Valencia volvió a vencer por 2-0 con dos goles de Juan Sánchez. El Valencia estaba en la Liga de Campeones, la más importante competición continental. La competición se dividía en dos liguillas antes de llegar a los cuartos de final. En la primera liguilla la situación se presentaba realmente complicada para un Valencia sin experiencia en la competición. El Valencia debía enfrentarse a Bayern de Munich, PSV Eindhoven y Glasgow Rangers, para disputarse dos puestos de acceso a la segunda fase. Dificil, pero no imposible, el Valencia realizó una primera fase impresionante terminando primero de grupo. El Valencia se impuso el 15 de Septiembre en el primer partido en Mestalla por 2-0 al Glasgow Rangers, con goles de Kily González y Moore (en propia puerta). El siguiente partido se disputó el 21 de Septiembre en Holanda contra el PSV, donde el Valencia logró arrancar un importante empate a un gol, con un soberbio golazo de Claudio López. El Valencia, por su juego, pudo haber conseguido más, pero se fallaron ocasiones muy claras. El tercer partido de esta liguilla era un plato fuerte, contra el Bayern de Munich en Alemania. El Valencia se presentó allí un 28 de Septiembre sin ningún miedo, decidido a ir a por la victoria, pero un error de Palop en el minuto 6 supuso el gol de los alemanes. El Valencia lo intentó sin cesar, hasta que en el minuto 80 Gerard logró de cabeza el gol del empate definitivo. Y todavía pudo ganar el Valencia, ya que el árbitro italiano Cesar Graziano, de infausto recuerdo para la afición, pitó el final del encuentro cuando Claudio López se quedaba solo ante el meta alemán. El Valencia empezaba a imponer su ley en el Grupo F, más conocido como grupo de la muerte. De vuelta a Mestalla para recibir al Bayern de Munich el 20 de Octubre de 1999, el Valencia no pudo pasar del empate a un gol (Ilie de cabeza), a pesar de haber realizado un buen partido. El Glasgow Rangers había vencido al PSV Eindhoven y la clasificación se ponía cuesta arriba. Pero el Valencia demostró su impresionante potencial en los dos últimos partidos. El 26 de Octubre el Valencia realizó un extraordinario partido en el Ibrox Park de Glasgow. Comandados por un excelente Mendieta, los jugadores valencianistas vencieron por 2-1, con goles de Mendieta y Caludio López. El último partido de la liguilla en Mestalla fue una fiesta. El partido se jugó el 3 de Noviembre contra el PSV Eindhoven, y el Valencia venció por 1-0, con un gol de Claudio López. El Valencia había superado con un tremendo éxito la primera fase de la Champions League, y Europa empezaba a tomar en cuenta a nuestro equipo. Si la primera fase fue complicada, peor sería la segunda liguilla. El sorteo había emparejado al Valencia con el Manchester United (actual campeón de Europa), la Fiorentina italiana y el Girondins de Burdeos de Francia. La cosa se presentaba complicada pero el Valencia superó el reto con éxito, quedando segundo de grupo y logrando el pase a los cuartos de final. El primer partido fue una fiesta en Mestalla. El 23 de Noviembre el Valencia se impuso por 3-0 (Farinós, Ilie, Kily González) al Girondins de Burdeos. Pero en el segundo partido, el Valencia se dió de bruces con la realidad. El Manchester United le endosó al Valencia un 3-0 en Old Trafford el 8 de Diciembre, todo un varapalo que bajo de las nubes al Valencia, a pesar de haber jugado un buen partido. La Liga de Campeones sufrió entonces el parón invernal, tiempo suficiente para que nuestros jugadores reflexionaran sobre lo que habían conseguido hasta ese momento y lo que eran capaces de conseguir. En el siguiente partido, disputado el 1 de Marzo del 2000 contra la Fiorentina, el Valencia volvió a perder, tras marcar el ex-valencianista Mijatovic un inexistente penalty que él mismo había simulado. La impresentable actitud de este jugador provocó que el partido de vuelta el 7 de Marzo fuese un infierno para él. El Valencia se impuso por 2-0 en un partidazo, con goles de Ilie y Mendieta. Pero el auténtico partidazo de esta liguilla lo disputó el Valencia en el Parc de Lescure contra el Girondins de Burdeos el 15 de Marzo, y el Valencia logró una goleada por 1-4 (Djukic, Mendieta, Kily, Sanchez). El último partido en Mestalla, el 21 de Marzo, fue un mero trámite. Valencia y Manchester se clasificaban con un empate, y así fue (0-0). El Valencia estaba en cuartos de final, y el rival era el todopoderoso Lazio de Roma. El Valencia afrontaba esta eliminatoria con la tranquilidad de saber que no había nada que perder, pues se había cumplido con creces en esta competición, y todo lo que llegara a partir de aquí serían éxitos. Pero nadie esperaba el espectáculo que dió el Valencia. En el partido de ida disputado el 5 de Abril en Mestalla, el Valencia pisoteó a la Lazio, y le metió una goleada por 5-2, con goles de Gerard (que realizó el partido de su vida y marcó tres), Angulo y Claudio López. El partido de vuelta (18 de Abril en el Olímpico de Roma) fue un trámite, el Valencia se dedicó a contener y salir al contraataque. Finalmente la Lazio venció por 1-0, pero el Valencia estaba clasificado. En las semifinales, esperaba un duelo fratricida contra el FC Barcelona. En cualquier otra situación hubiera sido al revés, pero lo cierto es que el Barcelona estaba atemorizado. El Valencia se había convertido en su bestia negra en las últimas temporadas y esta vez no cambiarían las cosas. Ante los ojos atónitos de media Europa, el Valencia goleó al Barcelona por 4-1, el 2 de Mayo del 2000, con goles de Angulo (2), Mendieta y Claudio López. El Valencia se había convertido en la revelación y el equipo de moda del continente, y la afición ya soñaba con la Final de París. Al día siguiente, una semana antes del partido de vuelta, ya había gente haciendo cola en las taquillas de Mestalla para hacerse con una entrada. Kily González era la viva imagen de la decepción tras caer en la Final de la Copa de EuropaEl partido de vuelta no supuso ninguna sorpresa. El Barcelona lo intentó todo contra un Valencia muy superior, pero sólo pudo ganar por 2-1 (gol de Mendieta). El Valencia estaba en la final, la cuidad vivió una noche de locura, fiesta y celebraciones. Toda Valencia vivió con intensidad el acontecimiento, y comenzó la odisea de conseguir una entrada para la Final. Todo el mundo quería estar allí. Colas de casi una semana, de varios kilómetros de longitud. Al final, más de 30.000 seguidores valencianistas invadieron París, para ver in-situ el enfrentamiento contra el Real Madrid, que había eliminado al Bayern de Munich en semifinales. Pero el sueño se convirtió en pesadilla. El Valencia pagó cara su inexperiencia y el bajo estado de forma de algunos de sus jugadores más importantes. El Real Madrid se impuso al Valencia, que realizó un nefasto partido, por 3-0. Nada que ver con la excelente trayectoria europea de esta temporada. Pero ahi queda el éxito de nuestro Valencia que saludaba al nuevo milenio situado entre los grandes de Europa. El Valencia había llegado en dos años desde la Intertoto, hasta el subcampeonato de Europa. Quién sabe si en el próximo Siglo el Valencia logrará la más prestigiosa corona, de momento, la admiración y el respeto del futbol europeo si se había conseguido.


Champions league 2000-2001

La trayectoria del Valencia CF en la Champions League 2000/2001 no puede ni debe considerarse como decepcionante, sino todo lo contrario. El Valencia realizó una competición muy brillante, siendo la admiración de todo el universo futbolístico del continente. Lo ocurrido en la final frente al Bayern de Munich fue considerado una injusticia por casi todo el mundo, perder la segunda final consecutiva en los penalties, fue sin duda una desgracia, pero en el fondo, hay que estar orgullosos de la temporada europea que realizó el Valencia. Al igual que el año anterior, el Valencia CF no había conseguido la clasificación directa para la competición. Antes, debía jugar una eliminatoria previa contra el Tirol Innsbruck austríaco en pleno verano. El partido de ida se disputó el 9 de Agosto de 2000 en el Tivoli Stadion de Innsbruck, donde el Valencia no pasó del empate a cero. La vuelta fue un paseo para el Valencia, y se jugó el 23 de Agosto en un abarrotado Mestalla, ante más de 50.000 espectadores. El Valencia se impuso por 4-1 y lograba la clasificación para la Champions League. Al partir como cabeza de serie, la suerte sonrió al Valencia en los sorteos mucho más que la temporada anterior. En la primera liguilla el Valencia debía enfrentarse a Olympique de Lyon (Francia), Olimpiakos (Grecia) y SC Heerenveen (Holanda). El Valencia realizó una gran primera fase y logró la clasificación matemática a falta de dos partidos. El 12 de Septiembre de 2000, venció por 2-1 al Olympiakos en Mestalla, con goles de Baraja y Diego Alonso. En la segunda jornada, disputada el 20 de Septiembre de 2000, el Valencia visitaba el Abe Lenstra Stadium en Heerenveen, Holanda. Los de Cúper pasaron su primer examen con buena nota, al imponerse gracias a un solitario gol de Kily González. En la tercera jornada, el Valencia volvía a imponer su potencial y vencía por 1-0 al Olympique de Lyon en Mestalla, al culminar Zahovic solo ante el portero un magnífico pase de Juan Sánchez. El 17 de Octubre de 2000, el Valencia visitaba el Estadio Municipal de Gerland en Lyon, Francia. En un sensacional encuentro, ante los ojos de toda Europa, el Valencia CF se aseguraba matemáticamente la clasificación para la segunda fase, siendo el único equipo de Europa que había ganado todos sus partidos. Estaba claro que el Valencia iba a por todas. Sin embargo, en el siguiente partido disputado el 25 de Octubre de 2000, el el Valencia perdió su primer partido en Europa frente al Olympiakos, en el Estadio Spiros Louis de Atenas. A los de Cúper les bastaba un punto en el último partido para ser primeros de grupo, por lo que la visita del SC Heerenveen a Mestalla el dia 7 de Noviembre de 2000 fue un mero trámite en el que el Valencia empató a 1 gol. Llegaba la segunda liguilla, y tras el sorteo el Valencia quedó encuadrado en el Grupo A. Los de Cúper deberían volver a enfrentarse al Manchester United y además al SK Sturm Graz austriaco y al Panathinaikos FC de Grecia, equipo en el que militaba el ex-valencianista Goran Vlaovic. Era un grupo asequible, exceptuando a los ingleses, pero en una nueva demostración de poderío, el Valencia no sólo se clasificó para cuartos de final, sino que lo hizo como primero de grupo. En el primer partido disputado en Mestalla el 21 de Noviembre de 2000, el Valencia vencía al Sturm Graz por 2-0 con goles de la pareja atacante del Valencia Carew-Sánchez. El 6 de Diciembre de 2000, el Valencia rendía visita a los griegos del Panathinaikos, pero no pasó del empate sin goles en Atenas. Tras el parón navideño, el 14 de Febrero de 2001 llegó el primer plato fuerte. El Manchester United, plagado de estrellas, volvía a Mestalla un año después. Estuvo Aimar, estuvo el fútbol, estuvo el público, un gran ambiente... Pero faltó el gol en un gran partido con el Valencia in crescendo en la segunda parte, y el partido terminó empate a cero. En el siguiente partido, disputado el 20 de Febrero de 2001, el Valencia volvía al teatro de los sueños, a Old Trafford. En un partido inolvidable, el Valencia sacó un punto en los últimos minutos tras una gran jugada de Vicente. El Valencia realizó un magnífico partido en el que mereció la victoria. Quedaban dos partidos y el Valencia lo bordó. En su visita al estadio Arnold Schwarzenegger en Graz (Austria), el Valencia demostró ser un grande de Europa, tras lograr una goleada por 5-0 frente al Sturm Graz en un espectacular partido. En el último partido, disputado el 13 de Marzo de 2001, con las Fallas ya preparadas, Mestalla vivió una fiesta con los goles de Sánchez y Anglomá, que permitieron al Valencia remontar y vencer el partido por 2-1, logrando la clasificación para cuartos de final como primeros de grupo. En los cuartos de final el Valencia CF tuvo que vérselas con otro equipo inglés, el Arsenal FC, viejo conocido de la afición valencianista por ser el rival de la final de la Recopa de 1980. El Arsenal estaba en forma y parecía un rival muy superior al Valencia. Pero el Valencia se adelantó en el partido disputado en el Highbury Park de Londres el 4 de Abril, gracias a un cabezazo de Ayala. Sin embargo, el Arsenal consiguió remontar con goles de Henry y Parlour en un partido apoteósico. El Valencia tenía que remontar en Mestalla. Con todas las apuestas en contra, Mestalla se llenó el 17 de Abril de 2001 para presenciar uno de los partidos más emocionantes de la historia del valencianismo. El resultado de 0-0 dejaba fuera al Valencia, los de Cúper tenían oportunidades pero no lograban marcar. Los nervios se apoderaban de todo Mestalla, hasta que apareció John Carew y logró un golazo al batir de cabeza a Seaman. El estadio explotó de júbilo y el Valencia lograba el acceso a las semifinales de la Liga de Campeones. En las semifinales, esperaba otro equipo inglés que estaba muy en forma, el Leeds United. El buen estado de forma de los ingleses, les hizo afrontar la eliminatoria con cierto aire de superioridad, pero el Valencia tenía las ideas muy claras, y supo muy bien cómo y cuándo golpear. En el partido de ida, disputado en Ellan Road el 2 de Mayo de 2001, el Valencia supo aguantar y pese a la insistencia de los ingleses, se trajo a casa un valioso 0-0. En Mestalla, el 8 de Mayo de 2001, el Valencia CF fue un vendaval, y barrió del campo al Leeds con dos goles de Sánchez y uno de Mendieta. El 3-0 daba al Valencia el pase a su segunda final consecutiva de la Copa de Europa, y provocaba una de las mayores fiestas que se recuerdan en la ciudad de Valencia. Una nueva tragedia para el valencianismo Y llegó el gran día, la gran final. El 23 de Mayo de 2001, el valencianismo vivió una de las noches más amargas de su historia, incluso peor que la de la temporada anterior. Todo estaba preparado, la ilusión se había apoderado de nuevo de la ciudad, miles de aficionados acompañaron al equipo en el Estadio de San Siro en Milán. Un rival de entidad, el Bayern de Munich que no asustaba al Valencia. Pero nadie podía imaginar cómo iba a terminar aquella aventura. El partido empezó bien para el Valencia CF, puesto que en el minuto 2 de partido, conseguía adelantarse en el marcador gracias a un gol de penalty de Mendieta. A los pocos minutos, el árbitro holandés Dick Jol señalaba otro penalty en contra del Valencia que paraba Cañizares. La ilusión crecía y el título parecía más cercano, pero al principio de la segunda parte, el Bayern conseguía empatar mediante otro penalty dudoso. Cúper había decidido sacar del campo a Aimar para dar entrada a Albelda, todo un manifiesto de intenciones. De aquí al final, miedo por parte de ambos equipos y pocas ocasiones de gol. Sólo en los veinte minutos finales el Valencia, con Zahovic en el terreno de juego, recuperó algo de vida e incluso el esloveno tuvo una clara ocasión. Ninguno de los dos equipos cometió errores graves que pudiera aprovechar el contrario y así se llegó al final. La prórroga fue un partido en el que nadie quería encajar. A pesar de eso, el Valencia tuvo las mejores ocasiones, pero no acertó. El Bayern buscaba el gol de oro con todo el equipo. Pero ya no era cuestión de delanteros. Los alemanes estaban físicamente mejor, y el Valencia bastante hacía con aguantar al borde del colapso. Y aguantó hasta los penaltis. Los lanzamientos de penalty no pudieron ser más emocionantes. Siete penas máximas lanzó cada equipo hasta que se llegó al final. Primero Paulo Sergio la tiró fuera y Mendieta marcó (0-1). Salihamidzic marcó y también lo hizo Carew (1-2), Zickler transformó su penalty pero a Zahovic se la paró Kahn (2-2), el lanzamiento de Andersson lo paró Cañizares, pero también a Carboni se la paró Kahn, en un penalty que fue el colmo de la mala suerte, pues despúes de pararla el portero, dió en el larguero y a punto estuvo de entrar. Fue el penalty decisivo (2-2). Effenberg marcó y después también Baraja (3-3), Lizarazu marcó y también Kily González (4-4). Y llegó la ronda fatídica, Linke transformó su penalty, pero Pellegrino no pudo transformar el suyo. Kahn detuvo el penalty (5-4) y convirtió al Bayern de Munich en el nuevo campeón de Europa. La tragedia asoló al valencianismo, nadie podía creer lo que había ocurrido, dos finales consecutivas perdidas, pero esta, si cabe, con más dolor. Cañizares fue la viva estampa de la desesperación al recoger la medalla de subcampeón. Sus lágrimas y lamentos, conmovieron a la afición valencianista, que se dio cuenta que tenía la obligación de levantarse con más fuerza que nunca, como lo hacen los campeones. Y así lo hizo, el valencianismo reaccionó, porque se dió cuenta de que había conseguido un lugar entre los grandes. Los títulos, jugando a ese nivel, llegarían tarde o temprano.